Santa Teresa del Niño Jesús o Santa Teresa de Lisieux

Santa Teresita

No tuvo hechos sobrenaturales en vida, sino despúes de su muerte

Nació en 1873 en Francia. Hija de un relojero y una costurera de Alençon. Tuvo una infancia feliz y ordinaria, llena de buenos ejemplos. Entró en la orden Carmelita.

Santa Teresa del Niño Jesús se consideraba pequeñita al lado de grandes místicos como Santa Teresa de Ávila o San Juan de la Cruz. Sin embargo sentía la llamada de Dios a ser Santa y ofrecerse por la conversión de los pecadores. Por ello, inventó el "caminito" a la santidad, que consiste en ofrecer cosas pequeñas viables y humildes, del cada día, a Dios, tener total confianza en Él y levantar el pie como un niño cuando se cae esperando ser recogido por Dios. Santa Teresita es una interpelación directa a todos nosotros. Si no somos Santos, es porque no queremos.

Aunque de poca formación, leía a San Juan de la Cruz, y comprendía sus textos llegando a sus propias conclusiones. Su obra más importante es Historia de un Alma. Se considera que es el libro católico más leído después de la Biblia.

No tuvo grandes hechos sobrenaturales como otros santos, pero si leemos su historia, vemos la providencia de Dios actuando en su vida, y los grandes dones que poseía. Por ejemplo, un confesor le dijo tras una confesión general, que no veía que hubiese tenido pecado mortal nunca en su vida. 

Tras su muerte fue nombrada copatrona de los Misioneros.

La santa prometió hacer caer una lluvia de rosas después de su muerte, es decir, una lluvia de beneficios hacia todos los que la invocan.